Llega la segunda entrega de esta palabra en la que Dios nos llama golpeadores y nos enseña, con los 300 de Gedeón a golpear todo altar idólatra y a golpear nuestro cántaro para poder ser efectivos en golpear el reino de Tinieblas.
El pastor Guillermo de California me pidió enseñar sobre golpear la tierra, en una continuación del mensaje que prediqué para El Amanecer de la Esperanza. Aquí tienes el enlace de la primera palabra: Golpea la tierra (parte 1).
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