
Johnny Cash es otro rebelde con causa, solo que a diferencia de James Dean tuvo un dramático encuentro con Jesucristo que lo liberó de drogas y del desastre personal y familiar. Su testimonio (que es resumido en esta predicación) es otra demostración del amor del Señor que lucha a favor de los hijos rebeldes , hasta convertirnos en instrumentos de honor en sus manos.